“Tener la luna al alcance de la mano”. Con esta frase dirigida a los aficionados a la alta relojería, la firma Perrelet ha sintetizado la experiencia que involucra su nuevo modelo Gran Fase Lunar Central, fabricado en alianza con el Grupo MHVJ (Manufacture Horlogère de la Vallée de Joux).
Se sabe que, antaño, tanto los observatorios astronómicos como los talleres relojeros contaban con relojes de referencia conocidos como “reguladores”. En ellos las horas y minutos eran indicadas en esferas diferentes para facilitar la lectura y marcar con precisión el ritmo de medición del tiempo. Manteniéndose fiel a los códigos estéticos que han forjado su reputación, Perrelet se ha propuesto traer al presente esta idea a través de su específico Regulador Retrógrado, una especialidad de vanguardia conseguida en conjunto con MHVJ y que incorpora el calibre P-211 para mayor precisión en su funcionamiento automático.
Ofreciendo, como ya es costumbre, una legibilidad clara, Gran Fase Lunar Central se caracteriza por la interacción adecuada de tres elementos técnicos: el arrastre, la estrella y el piñón, los que posibilitan una indicación exacta, y sin ajustes, de las fases lunares durante más de 100 años, en caso de marcha constante y sin depender la fecha.
El imponente disco lunar, sobrio y elegante, avanza al ritmo marcado por las horas, los minutos, los segundos y la fecha que se indica a través de la aguja central. El modelo viene con un brazalete de piel de cocodrilo y una hebilla desplegable. Su valor comercial es de USD 5,500.