Fotos © Jean Dunand Pièces Uniques
Lleno de citas históricas y estéticas, The Palace rinde homenaje a una de las épocas más interesantes de la historia.
Crear mecanismos horológicos sin precedentes como base de piezas de tiempo únicas, obras cumbre de la relojería contemporánea. Esas motivaciones llevaron a Christophe Claret –inventor y constructor de movimientos complicados– y Thierry Oulevay –empresario– a dar vida a la marca suiza Jean Dunand Pièces Uniques, en 2003.
Amantes del Art déco, el jazz y el cine, entre otras artes que vieron la luz en los Tiempos Modernos, ambos hombres se percataron de que también el reloj de pulsera pertenecía a esta época de la historia. Por ello, con su última creación –The Palace– se propusieron rendir homenaje a ese glorioso período entre 1880 y 1930.
Inspirado en el Crystal Palace de Londres, construido para la exhibición de 1851, y compartiendo detalles con la estructura arquitectónica que se erigió como el pináculo de la era –la parisina Torre Eiffel–, este reloj aspira a ser una obra de arte trascendente en el tiempo. Con esfera cuadrada y transparencia que deja las complicaciones a la vista, su calibre mecánico tiene un tourbillon volante de un minuto, posicionado a las 6. Sobre éste se encuentran las manecillas que indican las horas y minutos y el contador del cronógrafo de 60 minutos. A ambos lados del tourbillon volante, dos bandas: una corresponde a la reserva de poder de 72 horas, la otra al indicador GMT.
Un segundo huso horario, en tanto, recuerda por su forma la legendaria Milwaukee Mile, circuito de carreras estrenado en 1903. Entre las alusiones estéticas a los Tiempos Modernos destaca también la forma de las ruedas, puentes y complejidades a la vista, que citan la inolvidable película homónima (1936) de Charles Chaplin, que da cuenta de los albores de la Revolución Industrial.
Tanta historia en una sola pieza requería una caja capaz de albergarla, de ahí que se dimensionara en 48 x 49 mm. Con este lanzamiento se redefine el concepto de cronógrafo hasta ahora conocido.