Por Joana Calvinho
En familia, con amigos, en pareja o con los niños. La cocina siempre ha sido un lugar de reunión que con el tiempo se ha transformado en una actividad de ocio en sí misma. Atrás quedan esos recuerdos de la mamá que cocinaba sola y no quería niños a su alrededor entre fogones. Las nuevas tecnologías en electrodomésticos han generado espacios inteligentes que ofrecen una experiencia y que hacen de este lugar el corazón de la casa.
En familia, con amigos, en pareja o con los niños. La cocina siempre ha sido un lugar de reunión que con el tiempo se ha transformado en una actividad de ocio en sí misma. Atrás quedan esos recuerdos de la mamá que cocinaba sola y no quería niños a su alrededor entre fogones. Las nuevas tecnologías en electrodomésticos han generado espacios inteligentes que ofrecen una experiencia y que hacen de este lugar el corazón de la casa.
Una tendencia que se plasma en iniciativas de restaurantes y cursos de cocina varios, tanto para adultos como para niños. Muchas de las personas que participan en este tipo de actividades reconocen disfrutar de estas experiencias en la cocina y repetirla con los suyos, sin ese matiz latero o perezoso. Hollywood nos muestra en sus comedias románticas a los protagonistas, con un espumante o un vino, conversando, cocinando, y entretenidos mientras comparten tareas, y disfrutan el tiempo juntos. Pese a que hablo de ficción, es una realidad que muchas parejas comparten. También se incluye a los niños en la cocina, felices de realizar su postre favorito disfrutando de la compañía familiar en un ambiente sano.
Este panorama extiende y crea un valor agregado en la vida familiar, ya que permite compartir en torno a una experiencia que despierta la crea y ha dejado de ser percibido como una responsabilidad rutinaria. En este sentido, los avances de las tecnologías influyen porque la tendencia de involucrar a los gadgets en todos los ámbitos nos lleva a experimentar más allá de lo que siempre cocinamos.
Sin duda, le damos más importancia y a la vez nos hemos vuelto más exigentes con el proceso gourmet. El origen de los alimentos o su tratamiento y proceso de elaboración, son aspectos que cobran relevancia y se funden en la tendencia de involucrar la tecnología en nuestra vida diaria. En definitiva, sea como un juego para niños, o como una excusa para compartir tiempo en pareja o con amigos, lo cierto es que esta nueva forma de entender la cocina regresa como centro de actividad, ocio, experiencia y panorama que recrea y une a las personas, desarrollando sus sentidos donde cada uno aprende con el fin de compartir con los demás.
Este panorama extiende y crea un valor agregado en la vida familiar, ya que permite compartir en torno a una experiencia que despierta la crea y ha dejado de ser percibido como una responsabilidad rutinaria. En este sentido, los avances de las tecnologías influyen porque la tendencia de involucrar a los gadgets en todos los ámbitos nos lleva a experimentar más allá de lo que siempre cocinamos.
Sin duda, le damos más importancia y a la vez nos hemos vuelto más exigentes con el proceso gourmet. El origen de los alimentos o su tratamiento y proceso de elaboración, son aspectos que cobran relevancia y se funden en la tendencia de involucrar la tecnología en nuestra vida diaria. En definitiva, sea como un juego para niños, o como una excusa para compartir tiempo en pareja o con amigos, lo cierto es que esta nueva forma de entender la cocina regresa como centro de actividad, ocio, experiencia y panorama que recrea y une a las personas, desarrollando sus sentidos donde cada uno aprende con el fin de compartir con los demás.