27 de Febrero al 28 de Mayo de 2008
Por Solange Suppa
“Es imposible contarles todos los insultos que mis pinturas de este año me han generado, pero no me preocupa, ya que cuando deje de ser polémico, dejaré de ser importante”, escribió Coubert en una carta que dirigió a sus padres en Junio de 1822.
Gustave Coubert (1819-1877) nació en el seno de una familia adinerada en Ornans –Francia–, próximo a la frontera con Suiza. Estudió en el Royal College, en el pueblo cercano a Besançon, y en 1840 fue enviado a París a estudiar leyes. Desafiando a su padre, persiguió una carrera artística y aprendió copiando obras maestras en el Louvre.
Pionero en la historia del modernismo y uno de los principales artistas de mediados del siglo XIX en Francia, estaba constantemente en conflicto con la autoridad. Rechazaba las convenciones artísticas, desafiaba las normas académicas, y creaba obras que escandalizaban al público. Al rebelarse contra la tradición, allanó el camino para los Impresionistas, y a través de ellos, para el arte moderno.
Más de 130 pinturas al óleo y obras sobre papel del provocador artista, reunidas desde museos y colecciones privadas de Europa y Estados Unidos, se mostrarán en el Museo Metropolitano de Arte de New York, en la primavera boreal, en su primera retrospectiva completa en más de 30 años. La exposición itinerante de Gustave Coubert explora su carrera en todos los medios e incluye una selección de fotografías del siglo XIX que se relacionan con su obra, especialmente sus paisajes y desnudos.
La exhibición fue organizada por The Metropolitan Museum of Art, New York, Réunion des Musées Nationaux y Musée d’Orsay, París, y la Communauté d’agglomération de Montpellier Musée Fabre.
Gary Tinterow –curador a cargo del departamento de arte del siglo XIX, arte moderno y contemporáneo–, comenta: “La exhibición le dará al público de hoy una rara oportunidad para redescubrir a este complejo artista, y observar, a través de trabajos que realizó hace aproximadamente 150 años, los comienzos del arte moderno”.
Por Solange Suppa
“Es imposible contarles todos los insultos que mis pinturas de este año me han generado, pero no me preocupa, ya que cuando deje de ser polémico, dejaré de ser importante”, escribió Coubert en una carta que dirigió a sus padres en Junio de 1822.
Gustave Coubert (1819-1877) nació en el seno de una familia adinerada en Ornans –Francia–, próximo a la frontera con Suiza. Estudió en el Royal College, en el pueblo cercano a Besançon, y en 1840 fue enviado a París a estudiar leyes. Desafiando a su padre, persiguió una carrera artística y aprendió copiando obras maestras en el Louvre.
Pionero en la historia del modernismo y uno de los principales artistas de mediados del siglo XIX en Francia, estaba constantemente en conflicto con la autoridad. Rechazaba las convenciones artísticas, desafiaba las normas académicas, y creaba obras que escandalizaban al público. Al rebelarse contra la tradición, allanó el camino para los Impresionistas, y a través de ellos, para el arte moderno.
Más de 130 pinturas al óleo y obras sobre papel del provocador artista, reunidas desde museos y colecciones privadas de Europa y Estados Unidos, se mostrarán en el Museo Metropolitano de Arte de New York, en la primavera boreal, en su primera retrospectiva completa en más de 30 años. La exposición itinerante de Gustave Coubert explora su carrera en todos los medios e incluye una selección de fotografías del siglo XIX que se relacionan con su obra, especialmente sus paisajes y desnudos.
La exhibición fue organizada por The Metropolitan Museum of Art, New York, Réunion des Musées Nationaux y Musée d’Orsay, París, y la Communauté d’agglomération de Montpellier Musée Fabre.
Gary Tinterow –curador a cargo del departamento de arte del siglo XIX, arte moderno y contemporáneo–, comenta: “La exhibición le dará al público de hoy una rara oportunidad para redescubrir a este complejo artista, y observar, a través de trabajos que realizó hace aproximadamente 150 años, los comienzos del arte moderno”.