
Por Ignacio Bello
Fotos © St. Moritz Polo AG.
Se cumplió el 25º aniversario deL más destacado torneo de polo sobre nieve. Julius Bär obtuvo el premio mayor ganando al anterior campeón –Brioni– por 6 a 3½.
Unos 8000 espectadores asistieron al Cartier Polo World Cup on Snow, torneo que hace 25 años comenzó motivado por un grupo de fanáticos decididos a impresionar al mundo con un nuevo estilo de polo.
Aquello que nació guiado por el más puro espíritu deportivo, es hoy uno de los eventos de mayor calidad profesional y, a la vez, se ha tornado socialmente tan glamoroso como se pueda imaginar. Hoy, el hándicap de los participantes ha alcanzado un nivel muy alto, de entre 20 y 22 goles por equipo, lo que demuestra el grado de expertise de sus destacados jugadores. La 25ª Copa, que durante los primeros días permitió disfrutar de un espectáculo con un agradable marco invernal, se llenó de nieve y viento helado el día de la final, sin embargo, la batalla entre el ganador y el equipo de Brioni calentaron las gradas para un público decididamente entusiasta.
Fotos © St. Moritz Polo AG.
Se cumplió el 25º aniversario deL más destacado torneo de polo sobre nieve. Julius Bär obtuvo el premio mayor ganando al anterior campeón –Brioni– por 6 a 3½.
Unos 8000 espectadores asistieron al Cartier Polo World Cup on Snow, torneo que hace 25 años comenzó motivado por un grupo de fanáticos decididos a impresionar al mundo con un nuevo estilo de polo.
Aquello que nació guiado por el más puro espíritu deportivo, es hoy uno de los eventos de mayor calidad profesional y, a la vez, se ha tornado socialmente tan glamoroso como se pueda imaginar. Hoy, el hándicap de los participantes ha alcanzado un nivel muy alto, de entre 20 y 22 goles por equipo, lo que demuestra el grado de expertise de sus destacados jugadores. La 25ª Copa, que durante los primeros días permitió disfrutar de un espectáculo con un agradable marco invernal, se llenó de nieve y viento helado el día de la final, sin embargo, la batalla entre el ganador y el equipo de Brioni calentaron las gradas para un público decididamente entusiasta.